Otakus, ¡dadme fuerzas!

Hoy hemos tenido un "pequeño accidente" con la furgoneta. El conductor ha aparcado para esperar a Tati para que nos trajera más catálogos y al abrir su puerta el coche de atrás se lo ha comido y se le ha roto el cristal y todo (¡volando cosas!). A nuestro coche no le ha pasado nada y el tío empeñado en llamar a la policía. Nos hemos tomado algo en un bar observando el espectáculo, mientras llegaba Tatiana y se ha encontrado con el pastel y la policía preguntando que había pasado para dar el parte. Al final ha quedado en un susto y en una multa para la mujer del otro coche.
Con mi compañero todo bien, es muy majo pero con mis dos compañeras no tanto. Son difíciles de tratar, no hacen casitas, solo pisos con buzones y con muchos vecinos y no suben cuestas por que no se quieren cansar (yo que voy coja de una pata de las panzás de andar que me doy...). ¿Y que hacemos? Pues las casitas nos las comemos mi compañero y yo (a mi no me importa, el trabajo es el trabajo). Pero ha sido el colmo cuando la tía se ha enfadado por que ha tenido que hacer solamente 4 manzanas ella sola. Esperaba que yo la hiciera pero yo he acompañado a mi compañero para acabar las manzanas que habíamos empezado horas antes. Estamos en el coche ya para irnos y me pide el mapa para apuntar lo que habíamos hecho, y en vez de dármelo bien en la mano me lo tira a la cara. ¡Imaginaos la cara que ponemos el conductor y yo! He negado con la cabeza dando a entender que no valía la pena enfadarse y lo he dejado correr. ¡Encima maleducada! Menos mal que estas pavas se van el Lunés a no se donde y solo las tendremos que soportar un par de dias más! Otakus, ¡dadme fuerzas!